Vadea las corrientes cálidas de las suaves olas que bañan las arenas blancas de la playa. Escucha el “estruendo sónico” seguido de los gritos de emoción de los nadadores, mientras las pequeñas olas se van convirtiendo en grandes kahunas. Mientras sientes la subida de adrenalina, no pierdas de vista la ola creciente que se aproxima en tu dirección… ¡y prepárate para nadar!

Barrena la ola épica hasta que te lleve a la orilla. Con el continuo vaivén de olas, ¡seguro agarrarás una increíble!

Consulta el horario de las olas del día en la pizarra cerca de la orilla de la playa. No se admiten flotadores.

Vigila de cerca a los niños y a aquellos que no sean buenos nadadores.